En el tiempo que llevo trabajando, me he encontrado unos cuantos casos de personas que se quejan de dolor de cuello y espalda tras un accidente de coche. Normalmente, siempre ha sido por un alcance posterior (un coche les impacta por detrás) y no han sido a alta velocidad, como mucho a 40 o 50 km/h (recuerdo un caso en el que el choque se produjo a 20 km/h).
Aparece entonces el temido “latigazo cervical” (o whiplash en inglés), pero la gente suele quedarse sólo con esa idea. El dolor de cuello, la rigidez, los mareos, el dolor de cabeza… y después de un tiempo, existe una mejoría.
Hace unas semanas vino a la consulta una persona, paciente habitual, que hacía un par de meses que había tenido un accidente en coche. Como os podéis imaginar, pues por eso estoy hablando del tema, sufrió un impacto posterior mientras estaba parada en un atasco. Tuvo un fuerte dolor en el cuello de manera casi inmediata. Fue al hospital y le diagnosticaron “latigazo cervical”; ni esguince, ni contracturas… “latigazo cervical”, que ahora debe ser también una patología (así venía en el informe de urgencias) y no un mecanismo lesional. A lo que vamos, tras el diagnóstico, y habiendo realizado el correspondiente parte a la aseguradora, fue citada para darle rehabilitación. El tratamiento mandado por el médico rehabilitador de la mutua fue exclusivamente en la zona cervical, donde le realizaron termoterapia (onda corta) y 15 minutos de masoterapia. Dicho tratamiento duró 3 semanas (15 sesiones). Dos semanas después viene a verme diciéndome que tiene fuertes dolores en el cuello y en las lumbares, que por la mañana se levanta con la sensación de que no puede agacharse y le cuesta moverse de la cama.
Bien, supongo que alguno ya sabe por dónde voy, pero la gran mayoría desconoce porqué tanto rodeo.
En una colisión posterior, cuando somos nosotros los que estamos parados delante, el impacto llega a través del asiento, produciendo un aplanamiento de la columna lumbar para, posteriormente, extenderse por toda la columna vertebral hasta llegar al cuello, que al ser la parte más móvil y libre, es la que sufre toda la sacudida. Imaginaos un látigo (de ahí el nombre del latigazo cervical), para mover la punta con fuerza, tengo que sacudir el mango con ímpetu. El mango sería la pelvis, que sufre el impacto a través del asiento. Desde aquí, se mueve con fuerza a las lumbares. Obviamente, la punta del látigo (la cabeza y las cervicales), es la que más fuerza recibe, sobre todo al ser el fragmento libre y más móvil, pero no por ello debemos olvidar que esa fuerza que ha llegado al cuello, ha pasado por toda la columna vertebral.
Otra cosa tenemos muy clara todos, los seguros, cuanto menos paguen por una rehabilitación, mejor. Y en el tema de si se dan pautas a ciertos profesionales sanitarios o si hay ciertos profesionales que dedicándose a los seguros no saben cuál es el verdadero mecanismo lesional en una colisión posterior, no voy a entrar, pero me parece lamentable que, después de que la paciente recibiese el alta por parte de la mutua, tenga que ir a una consulta privada a tratarse de lo mismo por lo que deberían haberla curado.
Habrá quien diga que puede haberse curado y recaído, que el dolor lumbar que tiene ahora es por otra lesión u otro mecanismo lesional o puede que la hayan abducido los extraterrestres y le hayan implantado un chip que le produce dolor otra vez… pero la verdad es que, si un profesional de la salud, y más aún de los seguros, no valora la zona lumbar (ni dorsal) tras una colisión posterior, es de ser un cateto de manual.
Voy a citar un par de fuentes (para los más curiosos) y os voy a poner un vídeo y unas imágenes para demostrarlo.
- (hablando del whiplash) “Las lesiones de la columna cervical pueden producirse conjuntamente con lesiones en el raquis dorsal y lumbar”. (Jacobsson, L, Lundell, B, Alfredsson. Protecting against whiplash in rear-end collisions)
- “Con frecuencia los lesionados con esguince o latigazo cervical suelen referir dolores en niveles raquídeos diferentes al cervical y en especial en la región lumbar” (Aso Escario, J. V. Martínez Quiñones. Traumatismos raquídeos y lesiones no contiguas. Importancia del cribado con resonancia magnética de columna completa en el esguince cervical. Rev Esp Med Legal. 2009;35(1):3-11.)
- el whiplash debe considerarse como una afectación de la columna vertebral en su conjunto. (Croft, A. Is the lumbar Spine vulnerable low-speed rear-impact crashes?)
Como vemos en las siguientes imágenes, el primer desplazamiento se produce en la zona lumbar, moviéndola hacia delante e iniciando así el movimiento de látigo.
Tras esto, se produce el recorrido de la fuerza por toda la espalda, llegando a la sacudida de la región cervical.
En este vídeo, se centran mucho en la región cervical, pero si veis los primeros segundos y os fijáis en la pelvis y las lumbares, veréis que es donde se produce el primer impacto grande y el desplazamiento que luego recorre toda la columna vertebral hasta llegar a las cervicales.
Si nos damos cuenta, en inglés, el mecanismo de lesión se denomina “Whiplash”, lo que traducido a nuestro idioma sería “Latigazo”. En ningún momento, en la acepción inglesa, se refiere a la región cervical, pero en la traducción al castellano, las compañías aseguradoras han ganado muchos beneficios.